
Título: Elantris
Autor: Brandon Sanderson
Editorial: Nova
Saga: Elantris #1
Páginas: 794
Sinopsis
Bienvenidos a la ciudad de Elantris, la poderosa y bella capital de Arelon llamada la «ciudad de los dioses». Antaño famosa sede de inmortales, lugar repleto de poderosa magia, Elantris ha caído en desgracia. Ahora solo acoge a los nuevos «muertos en vida», postrados en una insufrible «no-vida» tras una misteriosa y terrible transformación. Un matrimonio de Estado destinado a unir los reinos de Arelon y Teod se frustra, ya que el novio, Raoden, el príncipe de Arelon, sufre inesperadamente la Transformación y se convierte en un «muerto en vida» obligado a refugiarse en Elantris. Su reciente esposa, la princesa Sarene de Teod, creyéndolo muerto, se ve obligada a incorporarse a la vida de Arelon y su nueva capital, Kae. Mientras, el embajador y alto sacerdote de otro reino vecino, Fjordell, usará su habilidad política para intentar dominar Arelod y Teod con el propósito de somerterlos a su emperador y su dios.
Opinión personal sin spoilers
Durante los primeros meses del año estuve leyendo la trilogía Nacidos de la bruma pues me habían dicho que era la mejor historia del autor para empezar a leerlo y la verdad es que me alegro muchísimo de haberlo hecho. Ya sabéis que esa trilogía me encantó y que me dejó con muchas ganas de leer algo más de Sanderson así que no tardé demasiado tiempo en ponerme con Elantris que también forma parte del famoso Cosmere. Se trata de una novela autoconclusiva, al menos por el momento. Se anunció que iba a tener una continuación pero todavía queda bastante para que falta así que por el momento se puede leer como una historia independiente. Además, es la primera novela que le publicaron al autor así que había leído opiniones de todo tipo, tanto muy positivas como diciendo que era el libro más flojo. Lo empecé con las expectativas algo bajas para que no me decepcionase y lo cierto es que no lo hizo, fue una grata sorpresa.
Hace diez años, Elantris era considerada la ciudad de los dioses con sus paredes resplandecientes y unos habitantes con poderes extraordinarios. Sin embargo, cuando una enfermedad denominada la Shaod azotó a los elantrinos dejándolos sin pelo y con manchas negras en sus caras, Elantris cayó en la desgracia. Los gobernantes de la ciudad adyacente Aralon decidieron exiliar a todos aquellos que fueran alcanzados por la Shaod al interior de Elantris, que enseguida perdió su brillo y majestuosidad. Raoden, el heredero al trono de Aralon, se despierta con los síntomas de la enfermedad así que es llevado a Elantris para pasar allí el resto de sus días justo el día que la mujer que iba a ser su esposa llega para conocerlo. Sarene no es una mujer que se conferme con la terrible situación en la que se ve envuelta sino que decide tomar las riendas de su vida e intentar cambiar las cosas.
Esta historia tiene tres claros protagonistas, todos muy bien construidos y perfilados al contar con personalidades muy diferentes entre si. Me sorprendió muchísimo la enorme profundidad que el autor le dio a cada uno de ellos gracias a sus debates internos y a sus grises pues ninguno es totalmente bueno ni totalmente malo.
Mi personaje favorito fue Raoden pues es un hombre muy noble y honorable que siempre intenta sacarle el lado positivo a las cosas. Quizás es el que menos evoluciona de los tres porque, aunque si cambia bastante a lo largo de la historia, si es cierto que no se ven cambios muy radicales en él. A pesar de ello, conecté muy rápido con él y es por eso que terminó encantándome tanto.
Por otro lado, Sarene también robó un pedazo de mi corazón con su fuerza y determinación. Es una protagonista femenina que destaca por encima del resto de mujeres presentes en la historia porque tiene unas ideas muy diferentes y también unos objetivos que dentro de la sociedad en la que vive no se considera algo que una mujer pueda alcanzar.
Para terminar con los protagonistas, Hrathen me parece que es el personaje más interesante de todos porque es el que más evoluciona y también el que tiene una mayor profundidad por todos esos debates que tiene consigo mismo al plantearse su fe y su religión. Al principio del libro era el personaje que más aburrido se me hacía por el hecho de que no conseguía empatizar demasiado con él pero al final terminó encantándome y pareciéndome totalmente fascinante.
Respecto a los personajes secundarios, hay una gran cantidad de nombres que van apareciendo a lo largo de la historia y que, en muchas ocasiones, no son especialmente relevantes. Algunos de ellos me costó bastante distinguirlos del resto por sus nombres similares o porque sus personalidades tampoco se me hacían demasiado características pero si que hay unos cuantos que tienen una mayor importancia y a los que terminé cogiendo bastante cariño. Eso si, no llegué a conectar del todo con ninguno de ellos.
Elantris está contado desde la perspectiva de los tres protagonistas en tercera persona. Al principio, se van alternando capítulos desde estos tres puntos de vista pero después los cambios se van dando mucho más a menudo. Mis capítulos preferidos fueron, sin lugar a dudos, los de Raoden ya que fueron los que permitieron conocer la ciudad de Elantris al máximo detalle a través de sus ojos aunque también me gustó muchísimo la perspectiva de Sarene. Mi principal problema con este libro, a pesar de que tampoco lo consideraría un problema, fue que durante la primera mitad del libro no me interesaba especialmente el punto de vista de Hrathen. Cada vez que tenía ante mi uno de sus capítulos, solo quería que se terminara para volver a los otros dos personajes que me tenían mucho más enganchada. Eso si, en la segunda mitad del libro consiguió atraparme también su visión y los tres narradores estuvieron más o menos a la misma altura.
Otra vez me gustaría alabar el sistema de magia que Sanderson creó para esta historia pues me parece muy bien conseguido y con bastante complejidad. Si es cierto que no llega los niveles de, por ejemplo, la alomancia de Nacidos de la bruma pero si que se podría considerar un buen ejemplo de hard magic system. En este caso, la magia se lleva a cabo mediante el trazado de unos símbolos en el aire llamados aones siguiendo unos parámetros muy concretos. A medida que va avanzando la historia, se van descubriendo cosas sobre esta magia que me parecieron bastante sorprendentes y originales.
Para terminar, considero que el ritmo es bastante bueno en general. Si es cierto que el principio, a pesar de que la trama empieza enseguida, es un poco pausado porque se están presentando las bases de la sociedad y del conflicto pero después mejora muchísimo. La segunda mitad del libro me la leí prácticamente del tirón de lo enganchada que estaba ya que no paraban de suceder cosas todo el rato. Incluso los momentos que son un poco más lentos y sin tanta acción, te mantienen intrigado y con ganas de continuar leyendo gracias a las intrigas políticas y al desarrollo de los personajes. Todo desemboca en un final que me pareció el perfecto para la historia y que deja la mayor parte de tramas y cabos bien atados.
Resumiendo, Elantris es una novela perteneciente al cosmere que no se queda atrás. Unos protagonistas con una enorme profundidad y evolución a lo largo de la historia. Una ambientación maravillosa que se me hizo muy interesante acompañada de un sistema de magia bien logrado y con un carácter diferente. Una prosa por parte del autor que explica con todo lujo de detalles lo que sucede. Un ritmo en general bastante bueno aunque con un inicio algo pausado. Un final muy a la altura de la historia.
En todos los desastres se puede encontrar algo de belleza, solo hay que saber dónde buscarla
Durante los primeros meses del año estuve leyendo la trilogía Nacidos de la bruma pues me habían dicho que era la mejor historia del autor para empezar a leerlo y la verdad es que me alegro muchísimo de haberlo hecho. Ya sabéis que esa trilogía me encantó y que me dejó con muchas ganas de leer algo más de Sanderson así que no tardé demasiado tiempo en ponerme con Elantris que también forma parte del famoso Cosmere. Se trata de una novela autoconclusiva, al menos por el momento. Se anunció que iba a tener una continuación pero todavía queda bastante para que falta así que por el momento se puede leer como una historia independiente. Además, es la primera novela que le publicaron al autor así que había leído opiniones de todo tipo, tanto muy positivas como diciendo que era el libro más flojo. Lo empecé con las expectativas algo bajas para que no me decepcionase y lo cierto es que no lo hizo, fue una grata sorpresa.

Esta historia tiene tres claros protagonistas, todos muy bien construidos y perfilados al contar con personalidades muy diferentes entre si. Me sorprendió muchísimo la enorme profundidad que el autor le dio a cada uno de ellos gracias a sus debates internos y a sus grises pues ninguno es totalmente bueno ni totalmente malo.
Un hombre contemplativo que se rodea de parias en su empeño por reconstruir la sociedad, una mujer que se niega a dejarse definir por los papeles que le impone la civilización y un sacerdote inmerso en una crisis de fe
Mi personaje favorito fue Raoden pues es un hombre muy noble y honorable que siempre intenta sacarle el lado positivo a las cosas. Quizás es el que menos evoluciona de los tres porque, aunque si cambia bastante a lo largo de la historia, si es cierto que no se ven cambios muy radicales en él. A pesar de ello, conecté muy rápido con él y es por eso que terminó encantándome tanto.
Por otro lado, Sarene también robó un pedazo de mi corazón con su fuerza y determinación. Es una protagonista femenina que destaca por encima del resto de mujeres presentes en la historia porque tiene unas ideas muy diferentes y también unos objetivos que dentro de la sociedad en la que vive no se considera algo que una mujer pueda alcanzar.
Para terminar con los protagonistas, Hrathen me parece que es el personaje más interesante de todos porque es el que más evoluciona y también el que tiene una mayor profundidad por todos esos debates que tiene consigo mismo al plantearse su fe y su religión. Al principio del libro era el personaje que más aburrido se me hacía por el hecho de que no conseguía empatizar demasiado con él pero al final terminó encantándome y pareciéndome totalmente fascinante.
Nadie puede renunciar cuando tu estás cerca. Te niegas en redondo a dejar que nadie desespere
Respecto a los personajes secundarios, hay una gran cantidad de nombres que van apareciendo a lo largo de la historia y que, en muchas ocasiones, no son especialmente relevantes. Algunos de ellos me costó bastante distinguirlos del resto por sus nombres similares o porque sus personalidades tampoco se me hacían demasiado características pero si que hay unos cuantos que tienen una mayor importancia y a los que terminé cogiendo bastante cariño. Eso si, no llegué a conectar del todo con ninguno de ellos.
Elantris está contado desde la perspectiva de los tres protagonistas en tercera persona. Al principio, se van alternando capítulos desde estos tres puntos de vista pero después los cambios se van dando mucho más a menudo. Mis capítulos preferidos fueron, sin lugar a dudos, los de Raoden ya que fueron los que permitieron conocer la ciudad de Elantris al máximo detalle a través de sus ojos aunque también me gustó muchísimo la perspectiva de Sarene. Mi principal problema con este libro, a pesar de que tampoco lo consideraría un problema, fue que durante la primera mitad del libro no me interesaba especialmente el punto de vista de Hrathen. Cada vez que tenía ante mi uno de sus capítulos, solo quería que se terminara para volver a los otros dos personajes que me tenían mucho más enganchada. Eso si, en la segunda mitad del libro consiguió atraparme también su visión y los tres narradores estuvieron más o menos a la misma altura.
Otra vez me gustaría alabar el sistema de magia que Sanderson creó para esta historia pues me parece muy bien conseguido y con bastante complejidad. Si es cierto que no llega los niveles de, por ejemplo, la alomancia de Nacidos de la bruma pero si que se podría considerar un buen ejemplo de hard magic system. En este caso, la magia se lleva a cabo mediante el trazado de unos símbolos en el aire llamados aones siguiendo unos parámetros muy concretos. A medida que va avanzando la historia, se van descubriendo cosas sobre esta magia que me parecieron bastante sorprendentes y originales.
Sin esperanza no había que preocuparse de la decepción
Esta es la primera vez que leo a Sanderson en español porque yo leí Nacidos de la bruma en inglés y la verdad es que fue una experiencia bastante buena. Tengo que admitir que la prosa no se siente igual que en su idioma original pues todos sabemos que siempre se pierde algo con ls traducciones pero creo que, de todas maneras, el traductor hizo un gran trabajo porque conserva bastante bien la esencia del autor. También influye en este aspecto que es la primera novela del autor publicada y que, como tal, tiene un estilo un poco menos trabajado y eso se nota. Aún así, me tiene totalmente fascinada su manera de escribir y de narrar los pensamientos de los personajes. Para terminar, considero que el ritmo es bastante bueno en general. Si es cierto que el principio, a pesar de que la trama empieza enseguida, es un poco pausado porque se están presentando las bases de la sociedad y del conflicto pero después mejora muchísimo. La segunda mitad del libro me la leí prácticamente del tirón de lo enganchada que estaba ya que no paraban de suceder cosas todo el rato. Incluso los momentos que son un poco más lentos y sin tanta acción, te mantienen intrigado y con ganas de continuar leyendo gracias a las intrigas políticas y al desarrollo de los personajes. Todo desemboca en un final que me pareció el perfecto para la historia y que deja la mayor parte de tramas y cabos bien atados.
Resumiendo, Elantris es una novela perteneciente al cosmere que no se queda atrás. Unos protagonistas con una enorme profundidad y evolución a lo largo de la historia. Una ambientación maravillosa que se me hizo muy interesante acompañada de un sistema de magia bien logrado y con un carácter diferente. Una prosa por parte del autor que explica con todo lujo de detalles lo que sucede. Un ritmo en general bastante bueno aunque con un inicio algo pausado. Un final muy a la altura de la historia.