Título: El cuchillo en la mano
Autor: Patrick Ness
Editorial: Nube de tinta
Saga: Chaos walking #1
Páginas: 477
Sinopsis
Prentisstown no es como el resto de ciudades. Desde que sus habitantes se infectaron con el germen pueden escuchar los pensamientos de la gente de su alrededor en un Ruido constante y abrumador. No existe la privacidad. No hay secretos. Todd Hewitt es el único adolescente en esta ciudad de hombres. Este nunca ha sido su lugar. Jamás ha encajado. Hasta que por casualidad encuentra un sitio en completo en silencio. Algo imposible. Un terrible secreto. Y ahora va a tener que escapar antes de que sea demasiado tarde.
Opinión personal sin spoilers
Hace ya unos cuantos años leí Un monstruo viene a verme de este mismo autor y lo cierto es que fue una muy buena lectura que me sorprendió bastante. Desde entonces he tenido pendiente volver a leer algo más de él y la trilogía Chaos walking siempre estuvo entre mis prioridades de todas sus publicaciones pues era la historia que más me llamaba la atención de él. Sin embargo, me echaba bastante para atrás el medio a que me decepcionara y también el hecho de que era una trilogía. No quería empezarla y después abandonarla porque no encontraba las continuaciones pero cuando vi que en la biblioteca tenían los tres libros esperándome no pude evitar empezarla.
Algunos seres humanos abandonaron el Viejo Mundo para comenzar unas nuevas vidas como colonos en el Nuevo Mundo. Todd es el último adolescente de la ciudad de Prentisstown y le queda muy poco tiempo para convertirse en hombre al igual que el resto de los habitantes. Después de que un germen enviado por los zulaques, especie indígena, acabara con la vida de todas las mujeres y niñas, los hombres escuchan continuamente los pensamientos del resto sin filtro y sin secretos. El ruido es una constante en sus vidas y Todd nunca se ha sentido a gusta. Sin embargo, todo cambia cuando descubre un lugar en completo silencio y tiene que escapar por su vida.
En primer lugar, Todd es un personaje al que no pude evitar coger cariño. Tiene un alma inocente y pura que por desgracia se ve afectada por el entorno que la rodea y por el mundo en el que vive. A lo largo de los capítulos me encantó ver como iba madurando, como se iba dando cuenta de ciertas cosas y como iba cambiando como consecuencia de las cosas que le pasaban. Me pareció un personaje con mucha profundidad y una gran evolución por lo que fue un auténtico placer leerlo.
Por otro lado, hay otro personaje también bastante importante del que prefiero no decir nada pues creo que cualquier cosa que mencione podría ser un spoiler y es mejor que empecéis el libro sin saber demasiado. Simplemente mencionar que no logré conectar tanto y que se me hizo algo más plano pero también me terminó gustando bastante.
Una mención especial a Manchee, el perro de Todd cuyos pensamientos puede escuchar debido al germen pues un animal extraordinario que me despertó mucha ternura y que también tiene mucha importancia en la trama. Todo el rato quería abrazarlo y decirle que todo iba a estar bien. Creo que le da un toque muy fresco y ameno a la novela el hecho de poder leer lo que piensa Manchee pues muchas veces sus interacciones me sacaron más de una carcajada.
Algo que me resultó curioso e interesante sobre El cuchillo en la mano es que vemos la historia desde la perspectiva de un chico de apenas 13 años. Esto es algo que muy pocas veces había experimentado y que por un lado se me hizo algo extraño por no estar acostumbrada pero que al mismo tiempo me gustó mucho pues es diferente.
A pesar de su extensión, casi 500 páginas, lo cierto es que me lo leí en muy poco tiempo debido a lo enganchada que estaba. La acción es un factor continuo en la trama, todo el rato están sucediendo cosas que te mantienen en vilo y con ganas de continuar. En ningún momento se me hizo aburrido, incluso con el principio me sentí atrapada. El libro en si es un viaje desde que Todd abandona Prentisstown y lo cierto es que no suelo leer novelas de este estilo pero esto no evitó que me gustara y que las páginas volaran. Además, el autor juega con el misterio y va desvelando información poco a poco, sin saturar y dando tiempo al lector para asimilarla lo cual se agradece. De vez en cuando suelta bombas, giros en la trama (algunos más inesperados que otros) que le añaden emoción a la lectura.
La ambientación es una de las mejores cosas que tiene pues, desde mi punto de vista, está muy trabajada y es muy completa. Se nos presenta este Nuevo Mundo con unos antecedentes que se explican en determinado punto de la novela y después lo vamos descubriendo poco a poco junto al protagonista. La verdad es que es un mundo bastante oscuro comparándolo con otros dentro de la literatura juvenil pero me encantó ese toque y toda la atmósfera que lo rodeaba.
El final es trepidante, pasaron muchas cosas seguidas que me dejaron con la boca abierta y, sobre todo, con muchas ganas de más así que no creo que tarde demasiado tiempo en volver a la biblioteca a por la continuación.
Resumiendo, EL cuchillo en la mano es una primera parte de trilogía que me ha sorprendido y que no me ha dejado indiferente. Un protagonista con mucha profundidad y que va madurando a lo largo de la historia. Unos secundarios algo planos pero a los que les cogí cariño. Un ritmo trepidante desde el principio con mucha acción. Una ambientación muy bien construida y un final que te deja con ganas de más.
Algunos seres humanos abandonaron el Viejo Mundo para comenzar unas nuevas vidas como colonos en el Nuevo Mundo. Todd es el último adolescente de la ciudad de Prentisstown y le queda muy poco tiempo para convertirse en hombre al igual que el resto de los habitantes. Después de que un germen enviado por los zulaques, especie indígena, acabara con la vida de todas las mujeres y niñas, los hombres escuchan continuamente los pensamientos del resto sin filtro y sin secretos. El ruido es una constante en sus vidas y Todd nunca se ha sentido a gusta. Sin embargo, todo cambia cuando descubre un lugar en completo silencio y tiene que escapar por su vida.
En primer lugar, Todd es un personaje al que no pude evitar coger cariño. Tiene un alma inocente y pura que por desgracia se ve afectada por el entorno que la rodea y por el mundo en el que vive. A lo largo de los capítulos me encantó ver como iba madurando, como se iba dando cuenta de ciertas cosas y como iba cambiando como consecuencia de las cosas que le pasaban. Me pareció un personaje con mucha profundidad y una gran evolución por lo que fue un auténtico placer leerlo.
Por otro lado, hay otro personaje también bastante importante del que prefiero no decir nada pues creo que cualquier cosa que mencione podría ser un spoiler y es mejor que empecéis el libro sin saber demasiado. Simplemente mencionar que no logré conectar tanto y que se me hizo algo más plano pero también me terminó gustando bastante.
Una mención especial a Manchee, el perro de Todd cuyos pensamientos puede escuchar debido al germen pues un animal extraordinario que me despertó mucha ternura y que también tiene mucha importancia en la trama. Todo el rato quería abrazarlo y decirle que todo iba a estar bien. Creo que le da un toque muy fresco y ameno a la novela el hecho de poder leer lo que piensa Manchee pues muchas veces sus interacciones me sacaron más de una carcajada.

A pesar de su extensión, casi 500 páginas, lo cierto es que me lo leí en muy poco tiempo debido a lo enganchada que estaba. La acción es un factor continuo en la trama, todo el rato están sucediendo cosas que te mantienen en vilo y con ganas de continuar. En ningún momento se me hizo aburrido, incluso con el principio me sentí atrapada. El libro en si es un viaje desde que Todd abandona Prentisstown y lo cierto es que no suelo leer novelas de este estilo pero esto no evitó que me gustara y que las páginas volaran. Además, el autor juega con el misterio y va desvelando información poco a poco, sin saturar y dando tiempo al lector para asimilarla lo cual se agradece. De vez en cuando suelta bombas, giros en la trama (algunos más inesperados que otros) que le añaden emoción a la lectura.
La ambientación es una de las mejores cosas que tiene pues, desde mi punto de vista, está muy trabajada y es muy completa. Se nos presenta este Nuevo Mundo con unos antecedentes que se explican en determinado punto de la novela y después lo vamos descubriendo poco a poco junto al protagonista. La verdad es que es un mundo bastante oscuro comparándolo con otros dentro de la literatura juvenil pero me encantó ese toque y toda la atmósfera que lo rodeaba.
El final es trepidante, pasaron muchas cosas seguidas que me dejaron con la boca abierta y, sobre todo, con muchas ganas de más así que no creo que tarde demasiado tiempo en volver a la biblioteca a por la continuación.
Resumiendo, EL cuchillo en la mano es una primera parte de trilogía que me ha sorprendido y que no me ha dejado indiferente. Un protagonista con mucha profundidad y que va madurando a lo largo de la historia. Unos secundarios algo planos pero a los que les cogí cariño. Un ritmo trepidante desde el principio con mucha acción. Una ambientación muy bien construida y un final que te deja con ganas de más.